Hace meses, Christine Lagarde, presidenta del BCE, lanzó un mensaje inquietante sobre una de las tradicionales virtudes del efectivo.
Una CBDC o Central Bank Digital Currency (en español, Moneda Digital de Banco Central), es una forma de dinero fiduciario digital que es emitido por el banco central de un país y que tiene valor de curso legal.
Pero también se habla ya de un control sobre la economía y los ciudadanos que sería brutal.
Mensaje inquietante de Lagarde
Un reciente discurso de Christine Lagarde, presidenta del BCE, lanzó un mensaje inquietante sobre una de las tradicionales virtudes del efectivo.
Largarde informó que el BCE colabora con la Comisión Europea, el Parlamento Europeo y varios ministros de economía para implementar un euro digital, en donde estaría Amazon.
Esta regulación llegaría en 2023, con lo que el euro digital comenzaría en 2025 o 2026. España por su parte ya anunció su propio proyecto de CBDC.
¿Medida de control?
Al respecto, el Lawyers for Justice de Irlanda, alertó sobre los peligros de los CBDC que “Catherine Austin Fitts dice que los banqueros centrales han estado planificando durante años para que ‘puedan dictar las reglas de cuándo y cómo puedes usar tu dinero’. Es por eso que la identificación digital es una línea que NO debemos cruzar. ¡Resiste la tiranía digital! #CashIsKing”
Nigeria lo impone a la fuerza
En este sentido, Nigeria anunció una drástica reducción en la cantidad de efectivo a manejar entre particulares y empresas y para retirar efectivo de cajeros automáticos.
Lo anterior, para impulsar su política “Nigeria sin efectivo” y aumentar el uso de la eNaira, la moneda digital del Banco Central de Nigeria (CBDC).
El Banco Central de Nigeria informó que los retiros estarían limitados a 45 dólares o (20,000 yenes) al día y USD 225 (100,000 yenes) a la semana de los cajeros automáticos.
Anterior a la medida, los límites diarios de retiro de efectivo eran de 338 dólares para particulares y 1,128 dólares para empresas.
En contexto, las tasas de adopción de la eNaira han sido bajas desde su lanzamiento el 25 de octubre de 2021 y menos del 0.5% de la población la utiliza.
“Identifícate para controlarte”
Para implementar el CBDC será necesario que los usuarios se identifiquen cuando accedan a los servicios del euro digital, pero se podrán mantener varios grados de privacidad para diversos pagos.
Lagarde añadió que se podrán añadir medidas como separar los datos de pago de la identidad, “permitiendo solo que las unidades de inteligencia financiera obtengan esa información dentro de un marco legal para identificar al pagador y receptor cuando se sospecha de actividad criminal”.
No más desconocidos. Lo más llamativo del discurso de Lagarde fue sobre el anonimato, que siempre ha sido una de las grandes ventajas de los pagos en efectivo para bien y para mal. Ese anonimato acaba con el euro digital con la excusa de evitar así fraudes y terrorismo:
“El anonimato total -como el que ofrece el dinero en efectivo- no parece una opción viable. Contravendría otros objetivos de política pública, como garantizar el cumplimiento de las normas contra el blanqueo de capitales y luchar contra la financiación del terrorismo. Y también haría prácticamente imposible limitar el uso del euro digital como forma de inversión -por ejemplo, mediante límites de tenencia o remuneración escalonada-, para lo cual es necesario conocer la identidad de los usuarios”
Christine Lagarde