Más de 1,000 proyectos inmobiliarios en Quintana Roo, Tulum y Riviera Maya necesitan digitalización y certeza jurídica.
No obstante que el mercado inmobiliario en México enfrenta diversos retos como el alza de precios en materiales de construcción, baja disponibilidad de mano de obra y un alza en la tasa de los créditos hipotecarios, el sureste mexicano representa una buena oportunidad.
Prueba de ello es que actualmente se desarrollan 1,000 proyectos inmobiliarios al norte de Quintana Roo, de los cuales, Tulum tiene 400 y la Riviera Maya otros 600 proyectos.Así lo dio a conocer Wilberth Gutiérrez Álvarez, Presidente Nacional de la Asociación Mexicana de la Industria Inmobiliaria (AMII), durante el webinar “Retos actuales del mercado inmobiliario en Quintana Roo”.
Inversión para mexicanos
Por su parte, Melania Cisneros Martínez, presidenta de AMII Tulum, agregó que Quintana Roo ofrece una gran oferta cultural, esparcimiento, naturaleza y lifestyle, que permite a mexicanos y extranjeros realizar una inversión inmobiliaria segura.
En su oportunidad, Marcelo Ramírez, presidente de AMII Cancún, señaló que todavía hay retos por resolver con el impacto ambiental, regulación de licencias y permisos para construcción, lo que dará a inversionistas mayor certidumbre.
Infraestructura, necesaria
Jorge Torres Landa, presidente de la AMII Bajío, mencionó el reto de la infraestructura, para garantizar la movilidad a través de la construcción de puentes, caminos, mejoramiento, mantenimiento de carreteras y servicios básicos de agua, luz y drenaje.
Gutiérrez agregó que la tecnología permitirá mayor transparencia y digitalización de trámites del gobierno, ya que hay procesos que oscilan entre las tres semanas a un mes, lo que es necesario reducirlo “a horas por medio de formularios o solicitudes en línea. Esta es sólo una forma de cómo la tecnología puede facilitar los procedimientos y la reducción de costos”.
Finalmente, Caterine Castillo, CEO y Cofundadora de la proptech NEIVOR, destacó que la tecnología garantiza el desarrollo y crecimiento inmobiliario futuro en regiones como Quintana Roo.