Denuncian grave saturación que sufre el Hospital Aurelio Valdivieso en Oaxaca.

¿Hecho en Dinamarca? Recién nacidos, en cajas de cartón en hospitales de Oaxaca

En redes sociales circula una imagen de un recién nacido que fue colocado para su seguimiento… en una caja de cartón.

Según el usuario Primera Línea MX, lo anterior, sucedió en un hospital público de Oaxaca, que ahora gobierna Morena:

“Ante la grave saturación que sufre el Hospital Aurelio Valdivieso en #Oaxaca y sin tener la voluntad por parte de los @SSO_GobOax y su titular @Alma_VelascoH en un hecho inédito colocan a bebés recién nacidos en cajas de cartón, urge la intervención del presidente @lopezobrador_ y de la @Ssalud_mx para abrir una investigación de porqué no hay dinero para comprar cuneros ¿este es el modelo Dinamarca?”.

México será Dinamarca

Lo anterior contrasta con las varias veces que el Presidente López Obrador ha reiterado que México tendría un sistema de salud como el de Dinamarca y que incluso, hace unos días, dijo que su gobierno mejoraría todas las condiciones de salud.

“Antes de que termine mi mandato, voy a cumplir mi compromiso de dar a todos los mexicanos un buen sistema de salud”, como parte de su speech político dentro de su Quinto Informe de Gobierno, al cual solo le quedan 10 meses.

Cabe recordar que desde el 8 de enero de 2020, prometió dar al país un sistema de salud como el del país nórdico… justo en este año 2023.

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Más allá del discurso político y la manipulación, el ejercicio del poder demanda una gran cantidad de consejeros, atención de conflictos y un espíritu de servicio.

El ejemplo máximo de un servicio a sus semejantes, lo encontramos en la Santa Biblia, en la imagen de Jesucristo, quien en un acto de humildad, proveía de alimentos, salud y sustento a los que le acompañaban y los que estaban bajo su resguardo.

Un pasaje extraordinario es cuando provee de manera milagrosa, el pan para más de 5 mil personas, como se nos detalla en Marcos capítulo 6, versículo 30 y siguientes.

Jesús alimenta a cinco mil

Los apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado.

Y como no tenían tiempo ni para comer, pues era tanta la gente que iba y venía, Jesús dijo:

—Vengan conmigo ustedes solos a un lugar tranquilo y descansen un poco.

Así que se fueron solos en la barca a un lugar solitario. Pero muchos que los vieron salir los reconocieron y desde todos los poblados corrieron por tierra hasta allá y llegaron antes que ellos. Cuando Jesús desembarcó y vio tanta gente, tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas sin pastor. Así que comenzó a enseñarles muchas cosas.

 Cuando ya se hizo tarde, se le acercaron sus discípulos y dijeron:

—Este es un lugar apartado y ya es muy tarde. Despide a la gente, para que vayan a los campos y pueblos cercanos y se compren algo de comer.

 —Denles ustedes mismos de comer —contestó Jesús.

—¡Eso costaría más de seis meses de trabajo![a] —objetaron—. ¿Quieres que vayamos y gastemos todo ese dinero en pan para darles de comer?

—¿Cuántos panes tienen ustedes? —preguntó—. Vayan a ver.

Después de averiguarlo, dijeron:

—Cinco y dos pescados.

Entonces les mandó que hicieran que la gente se sentara por grupos sobre la hierba verde. Así que ellos se acomodaron en grupos de cien y de cincuenta. Jesús tomó los cinco panes y los dos pescados y, mirando al cielo, los bendijo. Luego partió los panes y se los dio a los discípulos para que se los repartieran a la gente. También repartió los dos pescados entre todos. Comieron hasta quedar satisfechos y los discípulos recogieron doce canastas llenas de pedazos de pan y de pescado. Los que comieron fueron cinco mil.