Un convenio entre Airbnb y UNESCO que tiene en la mira a 11 entidades en México, manejaría discrecionalmente un impuesto sobre el hospedaje (ISH).
La coalición entre la mega proptech Airbnb, la UNESCO, la World Wildlife Foundation y la Federación Mexicana de Asociaciones Turísticas (FEMATUR), está afectando al mercado de vivienda, lo que ha causado el encareciendo en los precios de suelo, rentas y venta de propiedades en México.
Según lo dio a conocer un reportaje de Animal Político, aunque la UNESCO busca promocionar actividades turísticas “y comunitarias en la Ciudad de México”, ese organismo internacional cuenta con una alianza nacional con Airbnb que ya opera en varias entidades y que tiene en la mira a Yucatán.
Según la mega proptech Airbnb, la iniciativa “México por Tierra” busca promover la reactivación turística nacional con viajes seguros y sostenibles en comunidades pequeñas y áreas naturales protegidas que dio a conocer el 9 de agosto de 2021 para dos ciudades piloto: Ciudad de México y Yucatán.
“Amplia cobertura”
El convenio Airbnb y UNESCO se ha establecido en 11 estados en la estrategia nacional, paralelamente a la negociación de acuerdos para la recolección del impuesto sobre el hospedaje (ISH) en cada entidad.
Con la CDMX logró un acuerdo fiscal, con una negociación en Guanajuato, posterior a la oficialización en Guadalajara.
Los estados con acuerdos impositivos o de promoción (pues los acuerdos recaudatorios han incluido programas y medidas de promoción turística en beneficio a Airbnb) han sido Sinaloa, Querétaro, Ciudad de México, Quintana Roo, Estado de México, Jalisco, Oaxaca, Baja California, Guerrero, Yucatán, Baja California Sur y Colima.
“La materia de estos convenios llega a ser engañosa en varios casos. Aunque se publicitan como planes para obligar a Airbnb a pagar el ISH en cada entidad, varios tienen características similares al firmado con la Ciudad de México en cuanto a que resultan en favores, concesiones o medidas a favor de la compañía”, destaca Animal Político.
BC, tras los nómadas
Para Baja California, se busca atraer a los llamados “nómadas digitales” con la colaboración; en Oaxaca, el acuerdo coincidió con la introducción de un programa “Experiencias Airbnb”. Jalisco, por su parte, concretó un acuerdo para la formación de anfitriones “embajadores” que puedan atraer visitantes a través de la plataforma.
Pero “estas negociaciones han servido para fiscalizar de manera regular a la plataforma de alojamientos, ninguna negociación ha abordado el impacto que Airbnb tiene sobre la vivienda en México, los precios de la renta, y los precios del suelo. ¿Por qué a los mexicanos les debería preocupar que se promuevan estos convenios sin que se discuta el derecho a la vivienda adecuada?”, cuestiona Animal Político
Según el medio, que da a conocer un análisis del Economic Policy Institute sobre las ventajas y desventajas económicas que ofrece Airbnb fue que “el costo potencial singular más grande impuesto por Airbnb viene de un incremento en los costos de vivienda para habitantes de una ciudad si suficientes propiedades se convierten de vivienda de largo plazo a alojamientos de corto plazo”.
En este sentido, la oficina del “Comptroller” (quien dirige las finanzas y auditoría) de Nueva York, en 2018, explicó que por cada punto porcentual de viviendas puestas en Airbnb dentro de un vecindario causaba un aumento del 1.58% en los precios de la renta.
Por ejemplo, con 10% de viviendas en Airbnb, un vecindario observaría precios de renta 15.8% mayores; además, en los aumentos a la renta que se vivieron en NY entre 2009 y 2016, Airbnb fue causante directo del 9.6% en el cambio en precios.
“Investigaciones académicas y periodísticas en todo el mundo han demostrado que Airbnb, por su modelo de negocios y desregulación, acapara viviendas en masa, aumentando el costo de vida para la ciudad en general (…) por ello, los gobiernos Barcelona, Londres, París y Nueva York buscan limitar el impacto del gigante”.
Necedad de la 4T
Fiel al estilo de Morena, a pesar de la evidencia mundial, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, negó que Airbnb eleve los precios de las rentas, y dijo no tener conocimiento sobre algún impacto específico de la plataforma.
Este desconocimiento se ha logrado con esfuerzo, pues para mantenerlo su administración tuvo que impugnar una sentencia del Juzgado Décimo en Materia Administrativa de la Ciudad de México, que en mayo de 2022 le ordenó a su gobierno elaborar un “diagnóstico sobre la situación de la población inquilina y el impacto de la pandemia en el acceso a la vivienda de arrendamiento”.
¿Por qué suben las rentas?
“Los contratos de renta, afirma Animal Político, son como una compra al mayoreo: se firma un compromiso, por un año entero, donde se fija un precio de renta mensual. Este contrato opera a favor del propietario garantizando un ingreso mensual constante por todo el año. Al mismo tiempo, opera a favor del inquilino que, al prometer el pago de alquiler por un año (a veces asegurando una penalización si sale de la vivienda antes), obtiene un precio más bajo que si estuviera alquilando, por ejemplo, un hotel”.
Pero a nivel operativo, Airbnb conecta a propietarios de viviendas con un mercado mundial de personas que buscan rentas de corto plazo. El resultado es que los propietarios pueden cobrar más dinero por día de alojamiento que si estuvieran rentando a largo plazo.
Lo anterior genera una presión para que los arrendadores saquen sus propiedades del mercado de vivienda y las pongan en el mercado de alojamientos de corta estancia. En Ciudad de México ya se han identificado casos donde edificios enteros son convertidos a listings en Airbnb, expulsando a inquilinos.
Desalojos en La Condesa
Hace unas semanas, en El Universal, se dio a conocer el caso de una residente de La Condesa que pidió ayuda a la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum por el desalojo paulatino de varios residentes de un edificio de esa zona exclusiva.
La denunciante dio a conocer que mientras ella sigue pagando una renta de 10 mil pesos, Airbnb ofrece esos mismos espacios a más de 85 mil pesos al mes.
Airbnb “se come” a la CDMX
Según Animal Político, mostrando datos del INEGI, señala que la proptech Airbnb ya “tiene un nada despreciable 4.1% de las viviendas en la alcaldía Cuauhtémoc”.
En ese mismo espacio de La Condesa, Airbnb cuenta con 1,050 anuncios activos (776 viviendas enteras) al 18 de noviembre, mientras que el INEGI censó 7,670 viviendas particulares, con lo que la proptech tendría 13.69% de las viviendas en La Condesa.
Este mismo efecto se está generando en la Zona Metropolitana de Guadalajara, que a decir de Miguel Ángel Fong, hay un vacío legal a nivel turístico y de hospedaje, del que se está aprovechando la proptech:
“No hay ley. No está regulado, no existe en el municipio (de Guadalajara) el tema de Airbnb. Por eso deberíamos de empezar por definir qué es Airbnb: es una plataforma de hospedaje temporal, que eso igualaría los requisitos de cualquier hotel […] Nadie piensa en el uso de suelo para poder rentar en una plataforma su propiedad, que sería lo primero […] En el tema municipal no existe Airbnb ni el tema de la renta temporal, en ningún municipio que yo sepa”.
Para el acuerdo con la CDMX y Airbnb, Ángel Terral, director de Airbnb México aclaró que los que ponen el precio son los anfitriones y no la aplicación, y que buscan llegar a las rentas en Xochimilco, Venustiano Carranza, Gustavo A. Madero e Iztacalco.
Al respecto la secretaria de turismo Nathalie Desplas dijo que hay alrededor de 30 millones de nómadas digitales en el mundo, con más de 50% en Estados Unidos y si se lograra que el 5% del mercado americano llegará a la ciudad, dejaría 3 mil 720 millones de dólares. ¿pero para quién?
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