Inmerso en este enajenante tedio, no siente nostalgia por la luz del día ni por el parque o la iglesia.

Ahuyentando la soledad: Apps para agendar citas con desconocidos

En sociedades industrializadas, como Corea del Sur, Japón, China y Taiwán, el individuo postmoderno vive esclavo de una rutina diaria que le impide conocer más personas.

Fabian Acosta Rico / Universidad del Valle de Atemajac campus Guadalajara – México

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Lo anterior, salvo a las del centro laboral. El trayecto de la casa al trabajo y de vuelta a casa no ofrece oportunidades para cultivar una amistad o un afecto más formal. La conciencia de clase o la empatía proletaria son cosas del pasado.

En este contexto, las redes sociales se han convertido en un paliativo a la soledad. A falta de amigos físicos, lo de hoy es tener seguidores. Internet es el escenario de una vida social global, donde millones de usuarios consumen y crean contenidos, interactuando con la mediación de la tecnología. Sin una tablet o smartphone, no hay acceso ni comunicación en el ciberespacio.

Individuo posmoderno

Imaginemos un sábado típico de un individuo postmoderno. Trabajó medio día y regresa para pasar la tarde encerrado en su departamento de una sola habitación. Pide una hamburguesa por DIDI Food con un cupón de descuento y se dispone a ver un maratón de temporadas de Stranger Things en Netflix.

Tiene a su lado su teléfono inteligente para revisar simultáneamente WhatsApp, Facebook, Instagram y Tinder. En el quinto capítulo de la segunda temporada, dormita y despierta azuzado por su gato, que le reclama su lata de sardinas. Se va a la cama y le pide a Alexa que no lo despierte temprano, ya que no tiene nada que hacer el domingo, salvo conectarse en línea para jugar una partida de Fortnite en su consola recién comprada por Amazon.

Inmerso en este enajenante tedio, no siente nostalgia por la luz del día ni por el parque o la iglesia. Todo está a su alcance y bajo control. Sin embargo, en un día desventurado puede quedarse sin conexión de Internet o electricidad. Para estos casos, tiene una escaladora cerca de la pantalla plana, para combatir la ansiedad de un ayuno tecnológico. Si esto no basta, recurre a una pastilla de clonazepam para inducirse un prolongado sueño químico hasta que regrese la electricidad o el Internet.

Sociedad colmena

Esta triste estampa se replica cada vez más en esta modernidad líquida. Antes de que se termine de instaurar la sociedad colmena, algunos resisten utilizando las mismas armas de la modernidad para sortear la soledad. Un ejemplo son las cenas agendadas por Internet con desconocidos. Si no tienes amigos, puedes agendar una cena con desconocidos. Para cada necesidad de la vida moderna, siempre hay un emprendedor que detecta un nicho de mercado a explotar. Si estamos más aislados, sin posibilidad de conocer nuevas personas, estas plataformas vienen a salvarnos de nuestro abandono social y familiar.

Dos plataformas destacan en este ámbito: Confra, creada en Brasil en 2023, y TimeLeft, nacida en Portugal, que se ha expandido por todo el mundo, incluyendo América Latina. Confra se promociona con eslóganes llamativos como “Una cena con amigos que aún no conoces” y “Participa en una cena con seis desconocidos, o mejor aún, seis amigos que aún no conoces”. TimeLeft, por su parte, promete “momentos seguros para interactuar con las personas que te rodean” y “para que te involucres más en el mundo en el que vives”. Esta plataforma opera en ciudades de América Latina y otras partes del mundo.

Para formar los grupos de comensales, estas plataformas aplican cuestionarios a los usuarios para sondear sus gustos, afinidades y perfiles. Con base en esta información, un algoritmo asocia a seis personas que conformarán el grupo que compartirá la cena. Los restaurantes escogidos son de renombre, con buenas reseñas y críticas. Estos establecimientos establecen convenios con las plataformas para ofrecer un trato preferencial a los comensales y estar atentos a cualquier problema que pueda surgir.

Protocolos de seguridad

Todo está cuidadosamente planeado. Existen protocolos de seguridad para las reuniones, que incluyen informar a familiares y amigos sobre el encuentro, estar atentos a las pertenencias y bebidas, y abstenerse de transferir dinero o compartir información financiera. Las edades de los participantes suelen promediar entre 25 y 50 años, y hay opciones solo para mujeres o mixtas. En Confra, más del 60% de los usuarios son mujeres. En TimeLeft, la representación de géneros es más equitativa.

El servicio de citas tiene un costo. El interesado puede optar por una sola cena o comprar una suscripción, y los precios varían según el paquete elegido y el país. Los gastos del restaurante corren por cuenta del participante. Para facilitar la conversación, la plataforma ofrece juegos de preguntas sobre diferentes temas, algunos ligeros o cómicos y otros más serios. Además, se sugieren bares y discotecas para continuar la reunión después de la cena.

Conocer gente nueva

TimeLeft, creada por el francés Maxime Barbier, ha organizado 10 mil cenas con 60 mil participantes de todo el mundo. Confra, lanzada en Sao Paulo por Lucas Tugas y Guilherme Ovalle en julio de 2023, reporta 10 mil asistentes a sus cenas. Algunos usuarios se han mudado recientemente a una ciudad y desean conocer gente nueva, mientras otros ven estas cenas como una alternativa a Tinder. Incluso, algunos han encontrado pareja en estas reuniones.

Las cenas concertadas tienen éxito porque responden a una crisis social y emocional en nuestras sociedades modernas. Si no puedes encontrar amigos y pareja por tu cuenta, una plataforma puede hacerlo por ti. 

En antaño la gente socializaba en las Iglesias, los templos, eran el punto de reunión, casi natural, para los jóvenes que querían hacer nuevos amigos o incluso para flirtear. ¿Será que en esta postmodernidad ya no son la opción para salvarse del aislamiento y la soledad?