Antes de Oppenheimer, el horror ya había sido mostrado a través de una serie de cómics en manga y una película demoledora en dibujos animados.
El 6 de agosto de 1945 fue el punto de quiebre para la Segunda Guerra Mundial, cuando Estados Unidos lanzó la más terrible arma del hombre sobre la ciudad japonesa de Hiroshima.
72 horas después, Estados Unidos repitió con una segunda bomba atómica sobre la ciudad de Nagasaki, lo que disuadió al Imperio de Japón a rendirse el 2 de septiembre.
Antes de Oppenheimer
Sin embargo, antes de Oppenheimer, hubo otra gran película.
Cuando todo sucedió, Keiji Nakazawa tenía 6 años cuando se lanzó una bomba sobre su ciudad natal, Hiroshima.
Y a partir de la catástrofe, y como dibujante, decidió poner todo su arte para dar vida a los recuerdos imborrables y el horror en papel.
El primer volumen del manga “Barefoot Gen” se publicó en 1973. Sin embargo, serie de cómics duró más de 10 años y se adaptó a tres películas de acción en vivo y dos de anime, la mejor de las cuales, también llamada como el manga, que se estrenó el 21 de julio de 1983.
Exactamente años 40 años antes del estreno de Oppenheimer .
La película muestra, de manera inocente, las alegrías y los descubrimientos de la infancia ante la dura realidad de vivir una guerra.
Inocencia y vida
Gen y su hermano menor Shinji, corren alegremente por el campo de trigo de su familia, sus radiantes sonrisas reflejan una inconfundible inocencia infantil, además que se persiguen por la casa, peleándose para ver quién se come la última papa de la familia.
La película de Masaki observa cuidadosamente el amor que esta familia tiene el uno por el otro. Pero todo cambia el 6 de agosto, cuando empiezan a suceder cosas extrañas: las hormigas se dirigen a las casas en masa y se ve un avión B-29 en el aire.
Y llegó el apocalipsis.
La explosión de la bomba atómica en Barefoot Gen es una secuencia horrible e inolvidable. Todo el color de la película desaparece de la escena cuando cae la bomba, a excepción de una siniestra nube roja en forma de hongo que emerge de la vista de pájaro de Hiroshima. personas murieron instantáneamente.
Rusia y la amenaza impertinente
Las dos películas están en el contexto, ya que el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, criticó las amenazas de Rusia de usar armas nucleares, en momentos en que el país conmemoró este domingo el 78 aniversario del lanzamiento de la bomba atómica sobre Hiroshima.
Alrededor de 140,000 personas murieron el 6 de agosto de 1945 y 74,000 en Nagasaki.
“Japón, como única nación que ha sufrido bombardeos atómicos en la guerra, continuará los esfuerzos por un mundo libre de armas nucleares”, dijo el ministro durante una ceremonia en Hiroshima.
“El camino para lograrlo se está volviendo cada vez más difícil por las profundas divisiones en la comunidad internacional acerca del desarme nuclear y por la amenaza nuclear de Rusia”, señaló.
Para leer la notas originales:
Mucha gente comete el error de creer que la Santa Biblia afirma, “No matarás”, y busca aplicar este mandamiento a la guerra.
Sin embargo, la palabra hebrea literalmente significa “la muerte intencional y premeditada de otra persona con malicia”.
Con frecuencia Dios ordenaba a los israelitas ir a la guerra contra otras naciones (1 Samuel 15:3; Josué 4:13). Dios ordenó la pena de muerte para numerosos crímenes (Éxodo 21:12; 21:15; 22:19; Levítico 20:11).
Así que, Dios no está contra el matar en todas las circunstancias, sino sólo en contra del asesinato. La guerra nunca es algo bueno, pero en un mundo lleno de gente pecadora (Romanos 3:10-18), la guerra es inevitable:
¿Y por qué no decir (como se nos calumnia, y como algunos, cuya condenación es justa, afirman que nosotros decimos): Hagamos males para que vengan bienes?
No hay justo
9 ¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado. 10 Como está escrito:
No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios. Todos se desviaron, a una se hicieron inútiles. No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. Sepulcro abierto es su garganta; Con su lengua engañan. Veneno de áspides hay debajo de sus labios;
14 Su boca está llena de maldición y de amargura. Sus pies se apresuran para derramar sangre; quebranto y desventura hay en sus caminos; y no conocieron camino de paz. No hay temor de Dios delante de sus ojos.
Algunas veces la única manera de evitar que la gente pecadora haga un gran daño a los inocentes, es yendo a la guerra contra ellos, pero de manera espiritual.