En la víspera, la administración Biden se opuso a las cirugías trans para jóvenes, como medida política y para ganar adeptos.
Brandon Showalter, escritor y comentarista de The Christian Post, afirmó que las declaraciones de la administración Biden sobre su posicionamiento hipócrita sobre la llamada “afirmación de género” para que niños pidan operaciones para mutilarse el sexto, no son más que una “medida de relaciones públicas” tras los informes sobre la mutilación al menor Richard Levine (actualmente Raquel Levine) y las restricciones por ser menor de edad.
“La cruda realidad es que a niñas de 13 años se les han amputado los pechos y a niños de 15 años se les han mutilado los genitales con el objetivo de convertirse al sexo opuesto”, lo cual es imposible para un eventual cambio de sexo, dijo Showalter.
“Afirmar que operaciones quirúrgicas -tan brutales y médicamente innecesarias- (…) solo legitiman atrocidades que pronto serán conocidas como uno de los peores escándalos médicos de la historia”, arremetió.
Posición hipócrita
Y es que en la víspera, la administración Biden se opuso a las cirugías trans para jóvenes, luego del rechazo de grupos activistas.
En un despacho noticiso, el New York Times compartió extractos de correos electrónicos del grupo activista conocido como Asociación Profesional Mundial para la Salud Transgénero (WPATH) que pide que las operaciones se regularicen más.
El grupo LGBT, exigió a través de una carta, que la administración Biden reafirme su apoyo a las cirugías trans para menores.
Será un escándalo
Las discusiones sobre la postura de los funcionarios de Biden respecto a cirugías trans para jóvenes que se autoperciben como de otro sexo, se producen mientras la Corte Suprema de Estados Unidos se prepara para decidir sobre la constitucionalidad de una ley de Tennessee que prohíbe las cirugías de cambio de sexo, medicamentos que bloquean la pubertad y para hormonar a niños para que les crezcan los senos.
El editor del medio cristiano dijo finalmente que los grupos LGBT dominan al Partido Demócrata:
“La decisión revela el control ideológico y político casi total que tienen los activistas LGBT sobre el Partido Demócrata”, concluyó.