Desde hace meses, la Comisión Europea permite tokenizar acciones de empresas cuya capitalización sea inferior a los 500 millones de euros.
La reconversión inmobiliaria, que parte de la premisa de que los edificios comerciales vacíos se puedan convertir en residenciales, es más compleja que simplemente colocar camas y encender el WiFi, ya que es demasiado cara.
Sin embargo, en Estados Unidos, dos brókers inmobiliarios que han tenido experiencia en el comercio de bienes raíces con criptomonedas, explicaron a Inman New York que la tokenización puede financiar renovaciones comerciales complejas.
Por ejemplo, Piper Moretti fundador de The Crypto Realty Group en Los Ángeles y Shelly Vincent, corredora de empleo de HomeSmart en Colorado, aseguaron que no eran expertos en tecnología ni “conocían una sola línea de código”, pero sí trabajaron en entender los a veces complicados conceptos como tokens, smart contracts y blockchain.
Vale la pena capacitarse en tokenización inmobiliaria
También son dos de los pocos agentes inmobiliarios en todo Estados Unidos que han comprado y vendido bienes raíces utilizando criptomonedas, reservado para unos pocos iniciados.
“Con el sistema bancario tradicional, le di a Shelly 10 dólares a través de Venmo, pero, primero el depósito tiene que pasar por mi banco, los servidores de mi banco, luego, a los servidores de su banco, y luego de tres días, ella podrá recibir sus 10. Ahora, con la tecnología blockchain se vuelve una transacción entre pares”.
Con la blockchain, en Estados Unidos, una persona puede enviarle 10 dólares en moneda digital de cualquier tipo y llega a la otra parte en minutos. Esta acción puede ser “presenciada” por innumerables partes de verificación y registro.
Una representación digital
Recordemos que blockchain es un libro de contabilidad distribuido altamente seguro.
Agregó que los contratos inteligentes o smart contracts automatizan transacciones y agilizan los acuerdos. La tokenización, en su forma más pura, es una representación digital de activos.
Estas transacciones permiten a inversores cerrar acuerdos más rápidos desde cualquier lugar y nunca tener dinero encerrado en un activo durante largos períodos de tiempo.
Una vez que una propiedad cuenta con una dirección digital, se le pueden aplicar tokens o, en cierta forma acciones y una vez que la persona ha pasado el filtro de su identidad verificad puede comprar tokens desde cualquier lugar, cantidades más pequeñas, en ciertas áreas geográficas en todo el mundo.
“En lugar de toneladas de papeles, cuyo procesamiento lleva horas, días y semanas, al comprar tokens en plataformas con vinculación comunitaria e inclusión, cualquiera puede iniciar un proyecto de tokenización”.
Los acuerdos tokenizados de cualquier tipo están cubiertos por el mismo cumplimiento normativo y adaptabilidad que una herramienta de inversión que cumple con la SEC.
El primer paso para tokenizar una propiedad inmobiliaria es identificar una buena inversión, reunir un equipo, incluidos agentes inmobiliarios, asesores de inversiones y otros proveedores relevantes.
Encontrar la plataforma
Luego, cada persona decide la cantidad en dólares que se aplicará a cada token y se encuentra una plataforma blockchain adecuada, que iniciará el contrato inteligente y los mecanismos para las transacciones de tokens.
Moretti agregó que cuando se trata de convertir edificios de oficinas en espacios residenciales, los inversores pueden unirse para adquirir propiedades, tokenizarlas y distribuir la inversión por todo el planeta.
“Fuera de la transacción inicial, los fondos se pueden recaudar mucho, mucho más rápido que utilizando métodos de financiación tradicionales, lo que garantiza una solución ágil, segura e inspirada en la comunidad para solucionar un problema inmobiliario grave”.
El dato relevante
La Comisión Europea ya permite tokenizar acciones de empresas cuya capitalización sea inferior a los 500 millones de euros a través de emitir bonos, o deuda titulizada, por hasta 1.000 millones de euros, o participaciones en fondos menores a 500 millones.
Cualquier nuevo security token emitido no podrá tener un valor de mercado superior a 6.000 millones en el momento de la emisión, o 9.000 millones si se aprecia.
Con información de Inman y cinco días de España.